La obesidad y las enfermedades metabólicas crónicas están matando a pacientes con COVID-19: Ahora es tiempo para comer comida real y salvar vidas

A propósito de un artículo reciente (gracias Elvira!) sobre el colapso del sistema de salud en New York, toco el tema ya expuesto en otros post, que se ha convertido en “nuestro gran elefante en la habitación” (Obesidad y COVID-19)

Dra. María José Escaffi F., Dra. María José Mackenna R.

A propósito de un artículo reciente (gracias Elvira!) sobre el colapso del sistema de salud en New York, toco el tema ya expuesto en otros post, que se ha convertido en “nuestro gran elefante en la habitación” (Obesidad y COVID-19)

Se ha informado mucho en los medios de comunicación de que, al igual que en Reino Unido, la nación más rica del mundo (USA) ha tenido una respuesta tardía e insuficiente, lo que ha disminuido además la prevención que hasta el momento es la única “cura” para el COVID-19.  Se concluye además que las muertes en personal de salud (los llamados “primera línea”) podría deberse a mayor exposición y por ende a una alta carga viral, lo que haría más letal la enfermedad.

De ese supuesto, se deduce que la cura estaría en el distanciamiento social (no necesariamente aislamiento, dada la tecnología con la que contamos la mayoría), pero ¿cómo abordamos los efectos adversos de tales medidas en la salud de la población que deja de controlar sus enfermedades crónicas o no consulta por otras enfermedades y  en la economía? ¿En qué punto el “arresto domiciliario” hace más daño que bien?

Pero el elefante en la habitación real, es que nuestra salud ya estaba mal desde antes de esta nueva pandemia. En nuestro país, el 75% de la población sufre por malnutrición por exceso (sobrepeso/obesidad) de lo que surge la pregunta ¿Cómo esto afecta al COVID-19? Pregunta que fue desarrollada en un artículo anteriormente publicado en conjunto con @dra_mackenna.

En este documento también, se menciona la obesidad sarcopénica (que es la obesidad con falta de músculo, sin necesariamente un IMC alto) que puede clasificar erróneamente a muchos pacientes de edad avanzada como “normal” al ingreso hospitalario con COVID-19, teniendo escasa masa muscular que es un factor protector y exceso de masa grasa que además es disfuncional y proinflamatoria.

LA DIABETES Y EL SÍNDROME METABÓLICO AUMENTAN EL RIESGO

Un análisis reciente de la literatura, afirma que “los pacientes con diabetes tipo 2 y síndrome metabólico podrían tener un riesgo 10 veces mayor de muerte cuando contraen COVID-19”, motivo por el cual, el control por especialistas en el tema se hace crítico y fundamental. Por otra parte, otros organismos claves, han dicho que ahora es el mejor momento para dejar de fumar, citando una investigación de China que concluye que los fumadores tenían 14 veces más probabilidades de contraer una enfermedad grave después de contraer COVID-19 y dadas estas recomendaciones, es válido preguntárse, ¿por qué no pedirle también a las personas que “dejen los alimentos ultraprocesados”?

Con todos estos cambios de hábitos y recomendaciones de vida saludable, seguramente se estresaran unos cuantos y además necesitaremos ayuda psicológica “extra”, pero vale la pena mencionarlo para los que se atrevan!

El mensaje es claro:

  • Distanciamiento social #quedateencasa sin aislarte necesariamente
  • Come “comida real”, evita la comida procesada (enlatada, “lista para servir”, “comida chatarra”, con colorantes y preservantes por ejemplo, hidrátate con agua) Come 5 porciones de frutas y/o verduras ojalá de diferentes colores
  • Si fumas, es momento para dejarlo!
  • Entrena en casa
  • Cuida tu salud mental
  • Mantén el control de tus enfermedades crónicas más que nunca… al fin y al cabo, es la única cura conocida contra el COVID-19 hasta la fecha

Fuente: https://www.europeanscientist.com/en/article-of-the-week/covid-19-and-the-elephant-in-the-room/